Entrevista a Reda Diouba

El artículo de hoy entrevistamos al artista Reda Diouba, responsable de una de las canciones de la banda sonora de Los perdedores. Una canción que forma parte de su álbum 1095, un disco autobiográfico que representa los días estuvo en cautiverio y superando un proceso de adicción al juego que lo tenía totalmente atrapado en una pesadilla. El artista relata toda la historia que existe detrás de la batalla que libró contra los ‘demonios’ de su mente. Ira, vergüenza y arrepentimiento son algunas de las palabras con las que podríamos definir su testimonio.

¿A qué edad y cómo surge tu problema de adicción al juego?
Empezó sobre los 19-20 años aproximadamente, empezó como una manera de ganar dinero rápido divertida y también como refugio personal, había perdido muchas amistades y salía de una depresión

¿Cómo lograste superar el problema?
Tocando fondo, yendo a terapia grupal todas las semanas y haciendo lo que se me recomendaba hacer

¿Cómo la adicción al juego te afectó a nivel emocional?
Mientras estás dentro no eres consciente de lo que pasa, pero si notas irritabilidad, cambios de humor drásticos, estás triste y te enfadas contigo y con el mundo y tenía tendencia a estar solo, evitando a las personas que me rodeaban. Después de estar en terapia te das cuenta de que te deshumanizas por completo, digamos que te conviertes «en la peor versión de uno mismo».

¿1095 y se basa en tu experiencia personal sobre tu rehabilitación sobre la ludopatía, y comienza con una intro donde te abres en canal y cuentas esa parte de tu vida, cómo fue el proceso creativo para crear el álbum?
La idea de hacer un álbum siendo artista independiente con pocos oyentes ya de por sí es una locura, pero si a eso le sumas que no tenía dinero ya que me lo fundí apostando, que el poco que tenía era controlado por mi familiar de apoyo y el problema en sí, pues como dicen aquí «el hambre agudiza el ingenio»

La idea del álbum surgió como una manera de ser escuchado durante el proceso, ya que fue creado a la par que me rehabilitaba. Quería contar de primera mano aquello por lo que estaba pasando sin mayor pretensión, como si de una segunda terapia se tratara.
Fue una construcción lenta en la que iba y volvía constantemente, cada día aprendía algo nuevo y a los meses tenía que ir hacia detrás para cambiar cosas del proyecto.

¿Con qué edad decidiste que tu vida querías que estuviera vinculada a la música?
Nunca lo he tenido claro la verdad, empecé a rapear en el cole en quinto/sexto porque mis amigos lo hacían, escuchaban mucho rap y me valía para escribir sobre mis movidas de entonces, iba a batallas de freestyle a pasar las tardes. No destacaba por ser el mejor rapeando o cantando, pero algo en mi me decía que era el camino y me servía de terapia, y a base de entrenar y practicar pues fui mejorando y evolucionando mi cantar.

¿Cuáles son tus referentes musicales?
No soy de fijarme en artistas como tal, me gusta la música hecha por los negros y negras y toda aquella hecha con emoción, que provoque algo en quien la escuche, los nombres van y vienen, las emociones permanecen

Uno de tus temas estará incluido en el cortometraje Los perdedores, ¿Qué le dirías a los jóvenes que se enfrentan a este problema?
Que no están solos.
Somos muchos los que hemos pasado por esta aducción y es posible salir si haces lo que se te pide. Busca asociaciones en tu ciudad o información en internet, no tengas miedo y cuéntaselo a tu familiar más cercano, te van a ayudar.

La familia es la principal perjudicada en la adicción al juego de nuestro protagonista, ¿Cómo abordó tu familia el problema o que miembro de tu familia te ayudó más?
Yo no lo hice del todo bien sinceramente. Mis padres no se enteraron de mi rehabilitación hasta 3 meses después, yo estaba en Salamanca y ellos en Tenerife, entendí que el palo era demasiado gordo y que no me iban a entender (el tabú, el miedo, el estigma de la adicción), quizá su reacción fuera llevarme a casa en vez de darme tiempo a recuperarme, lo cual habría engordado más el problema. Mi familiar de apoyo fue Alicia, mi pareja, ella entendía de primera mano por todo lo que estaba pasando. Para ella fue un proceso complicado, no es fácil admitirlo y tener que enfrentarte a un problema como este, y menos si no tienes la obligación, aunque esta adicción se caracteriza también por la manipulación y los daños colaterales, la rehabilitación es a dos bandas. Pero un alivio a la vez, de escuchar a gente que ha pasado por ello y poder ponerle nombre a cosas que quizás no lo tenían durante la adicción.

Reda Diouba

Joven isleño, con ascendencia marroquí, que sorprende por su manera de fluir y sentir el RnB y el pop. Conocido antes bajo el pseudónimo de Awitaboy, del cual lanzó su primer álbum ‘ÁNGEL CAÍDO’, sigue su camino artístico sin perder la esencia de su discurso, »llorar para brillar» menos.

Síguelo en su Instagram y Twitter escucha su álbum en Spotify.

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